La considerada etapa reina de la Challenge de Mallorca, con final en el alto del Mirador de Colomer, dio un pequeño vuelco a la prueba y respondió a la expectación que había despertado eniendo como protagonistas al holandés Thomas Dekker (Rabobank) y al gallego Ezequiel Mosquera (Karpin Galicia), que pasa a ser el nuevo líder de la carrera.Dekker estrena la temporada ganando la jornada entre Pollenca y el alto del Mirador de 161,4 kilómetros, en los que invirtió 3 horas, 55 minutos y 43 segundos superando por dos segundos al ruso Vladimir Gusev (Discovery) y los españoles Alberto Fernández (Saunier Duval) y Ezequiel Mosquera (Karpin Galicia) que pasa a ser el nuevo líder.Mosquera pasa a ser el flamante líder de la carrera igualado a tiempo con Gusev y Fernández; mientras que Luis León Sánchez (Caisse d'Epargne) está a cinco segundos y David de la Fuente (Saunier Duval) se va a los ocho segundos.Las diferencias no son excesivas y sirven para dar más emoción a un prueba tan peculiar como ésta en la que el equipo Caisse D'Epargne, sin hacerlo mal, no pudo repetir su actuación de días anteriores en el tramo final de la tercera puntuable, la ascensión al Mirador de Colomer.El conjunto español hizo pleno en la jornada anterior, con el triunfo de etapa de Vicente Reynés y al colocar al frente de la general a José Joaquín Rojas, por lo que era el equipo a batir y a marcar el ritmo de la jornada para mantener la superioridad exhibida en la segunda.
Los componentes del Caisse d'Epargne no dudaron en asumir la responsabilidad desde el comienzo. Muchos intentos de fuga y mucho viento que propició que cuando tan sólo se llevaban 18 kilómetros en cabeza del pelotón quedaran once corredores entre los que se encontraba uno de sus componentes.Una aventura que estaba llamada al fracaso, pues en ella también estaba el lituano Tomas Vaitkus, una de las revelaciones de la carrera y que en la salida de la etapa era tercero con el mismo tiempo que Rojas y Reynés.La aventura llegaba a su fin poco antes de la ascensión del Puig Major, un puerto exigente y cuya cima estaba a 50 kilómetros para el final. Una ascensión que sirvió para hacer definitivamente la selección definitiva.Muchos ataques que no fueron a ninguna parte y fue en las primeras rampas del Mirador de Colomer cuando un tirón de Dekker sólo tuvo respuesta en Gusev, Fernández y Mosquera; mientras que el grupo de Reynés se dejaba media docena de segundos y el líder en la salida Rojas casi dos minutos.La cuarta y penúltima etapa tendrá como salida Soller y llegada en el Puerto de Soller tras 164 kilómetros de viaje y los altos de Can Costa, Sa Batalla (se asciende en dos ocasiones) y Puig Major todos catalogados de segunda y la cúspide del último se encuentra a tan sólo una veintena de kilómetros de la meta final.
Fuente y Foto: www.todociclismo.com (13.02.2007)
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